viernes, 28 de junio de 2019

TRABAJANDO A TODO VAPOR PARA TREPARNOS AL TREN MAYA

LOS AVATARES DE LA BIBLIOTECA DE JORGE DENEGRE VAUGHT PEÑA





 
 
Presidente: los libros no están libres; permanecen apresados, así en sus libreros, callados y totalmente inservibles. Es por culpa de sus colaboradores , ya que no se les ha aclarado eso de la frugalidad de su gobierno!
Usted podría  adquirirlos y llevarlos en el TREN MAYA, allá donde nació mi padre quien consagró su vida a estudiar particularmente Campeche, habiendo vivido desde su niñez en Yucatán, Ciudad del Carmen, y muchas otras lugares del SURESTE y por eso, con grandes sacrificios,  fue adquiriendo uno por uno esos tesoros bibliográficos que le sirvirieron para escribir la historia de su tierra natal y el tema fundamental de las Piraterías en la Laguna de Términos.
Por otra parte, muchos investigadores del INAH ya saben que perdí la biblioteca que mi padre me legó y que se ignora el paradero de esas colecciones de biografías, de literatura mexicana, de arte, de cultura nacional, de historia de México y más que fueron saqueadas.  Así, para desgracia de bibliófilos, bibliógrafos e historiadores  se dispersaron, diluyeron, se fueron, a lugares ignotos, joyas únicas para la investigación de nuestro pasado, en el fraude más grande en contra de nuestro patrimonio nacional que jamás se haya cometido en estas tierras.
<Al respecto, Juro por la memoria de mis ancestros, que nunca fui informado, advertido o notificado de semejante despojo que sufrí en mi propiedad ubicada en Chicago 127, en la Colonia Nápoles>...
Ahora, en  la miseria espiritual, intelectual y económica, precisamente, voy a la ciudad de México para vender el cascarón, la casa donde se encontraba una de las más grandes bibliotecas particualres de América. Y he negociado con el comprador que ponga una placa conmemorativa sobre la efímera existencia de dicha biblioteca, como contribución a la crónica de las calles de la ciudad más antigua del continente.
 
 
 
 
Busque la historia de las grandes colecciones y sabrá de incendios--como el de Alejandría-- de hecatombes y de saqueos tras sangrientas batallas y guerras terribles, pero nunca, nunca, nunca, 220 mil libros importantes para México habían dejado un edificio para no volver. Y por una corazonado hace una década salvé esta colección, (que para mi desgracia ya había adquirido el Gobierno de Campeche y hasta me dio 350 mil pesos de adelanto y vino el huracán Gilberto, <el Huracán Gilbert fue uno de los ciclones tropicales más intensos, devastadores y mortíferos registrados en el océano Atlántico durante el siglo XX por la Organización Meteorológica Mundial (OMM). En septiembre de 1988, Gilberto asoló el Caribe y el golfo de México por cerca de nueve días. En México se le conoce como el Huracán del Siglo XX y en Cuba como El Huracán Asesino.> y entonces vino el Director de Cultura del Gobierno, hizo una actuación teatral genial y declaró que ya no se compraba la Biblioteca!!!>... therefore, la saqué de la Gran Biblioteca de Chicago en la Nápoles y la llevé a mi hogar en la calle de Mediz Bolio, en Mérida, Xochitepec y allí permanece silenciosa bajo el cuidado de una niña, mi hija Aliz.
 

 
 
No es justo que por una tremenda equivocación del "mal" llamad@ Austeridad Republicana, tacañería, avaricia, mezquindad, avaricia, cicatería, de los miembros del gabinete; por su  desventurada interpretación de la actitud del patricio oaxaqueño BENITO JUÁREZ, que así denominó a su moral pública y política para que en su gabinete no hubiese dispendio y ejercieran  los burócratas una vida frugal y digna como auténticos servidores públicos, no se lleven nuestros libros a Campeche.
 
Cabe precisar que el conjunto de herramientas para alcanzar los objetivos de la Ley de Austeridad, no debe afectar, suprimir, disminuir o restringir programas sociales y derechos tutelados en la Constitución y las leyes, principalmente el de la educación, la difusión de la cultura y la investigación intelectual.
Todo lo contrario, el propósito es claro: hacer eficiente el gasto destinándolo efectivamente al interés general, para liberar recursos que serán destinados a financiar el desarrollo y la prosperidad de los mexicanos. En un México con más de 53.4 millones de personas en pobreza, ha sido práctica cotidiana que los servidores
públicos al frente de las instituciones se beneficien de toda clase de bonos, prestaciones y privilegios; situación que hace imperante la necesidad de establecer principios de austeridad en el gobierno como un criterio rector del servicio público, que reduzca el costo de las distintas entidades, eliminando el dispendio de los recursos
públicos.DE ACUERDO.
Las cifras del despilfarro son exorbitantes, año con año se develan escándalos de derroche de recursos en bienes y servicios suntuosos, como lo son, enunciativamente, seguro médico particular, automóviles nuevos, camionetas blindadas, choferes, guardaespaldas, viajes en helicópteros o aviones privados, y en muchos casos
comidas y bebidas, estancias en hoteles y restaurantes de lujo, comportamientos que durante varias décadas se consideraron normales entre los políticos y
gobernantes. DE ACUERDO.
Es menester recuperar la dignidad del servicio público y la única vía es tener en cuenta que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre. DE ACUERDO.
 
Por otra parte, que nadie espere que se cometa el crímen bárbaro en contra del descendiente de un hombre que se quitó el pan de la boca y sí vivió en la pobreza adquiriendo cada libro con dinero que le prestaba el Monte de Piedad (donde había un prestamista, un sabio erudito, el maestro Ugalde, de renombre) en aquellos descubrimientos de libros rarísimos o documentos, y que cuando veía una joya bibliográfica entonces don Jorge hiciera malaberes para llevar libros al empeño y adquirir la nueva alhaja de la corona libresca ....La que primero que nada leía concienzudamente, la estudiaba y la aplicaba en sus trabajos de investigación, incluyéndolo en su bibliografía.
Pues por eso, ese hombre consideraba un asesinato que alguien pretendiera que le regalara un solo libro de sus colecciones las cuales preservó, cuidó y resguardó en la colonia Nápoles pero NUNCA NUNCA para que a nuestra muerte, suceda loa quue ya aconbtció: probablemente, se dispersarán, se perderán irremisiblemente como ya pasó hace un par de meses con la biblioteca JORGE DENEGRE VAUGHT PEÑA, de la calle de Chicago, en la Nápoles!!!
 
Y yo que sobrevivo gracias a la pensión que recibo por mi trabajo DOCENTE, DE INVESTIGACIÓN SEMIOLÓGICA Y DE DIFUSIÖN DE LA CULTURA, por 39 años,  en la DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES, EN LA CARRERA DE COMUNICACIÓN SOCIAL, EN EL ÁREA SEMIOLÓGICA, de la Universidad Autónoma Metropolitana, jamás toleraré que nadie pretenda persuadirme de ofender la memoria del inmortal librero de la Rabindranath Tagore < así llamada porque la visitó en su inolvidable viaje junto con José Vasconcelos y Gabriela Mistral.>
 
Sin duda, fui partícipe de los sacrificios económicos de mi padre. No sería justo que cuando un bibliófilo decide vender sus bienes muebles, de esa calidad intelectual, moral, cultural, ética  no se le pague lo justo y necesario para su subsistencia, más tratàndose de un anciano que sólo sobrevive de su pensión univeritaria.
 

 
Ayer me habló el señor director de la Biblioteca que yo tantos años atrás visitaba para platicar con el Maestro de América José Vasconcelos, cuando adolescente, y me dieron la gran noticia de que el escritor moderno José Mariano Leyva Pérez Gay,  quiere ponerse de acuerdo conmigo sobre el HOMENAJE QUE LE DEBE RENDIR CAMPECHE a JORGE DENEGRE VAUGHT PEÑA, y no me avergüenza conffesarle que me puse a llorarme puse a llorar, conmovido profundamente por esa excelente acción que usted, señor Presidente está llevando a su ejecución. Gracias con toda el alma. Y por eso me atrevo a contarle a usted todo esto en la página de mis blogas dedicada a usted desde hace mucho: CARTAS A MI TOCAYO EL SEÑOR PRESIDENTE DE LA NACIÓN: https://lettersamlo.blogspot.com/2019/06/trabajando-a-todo-vapor-para-el-proyecto-del tren-maya.html

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